El estilo en el cuento.

 

LA RENOVACIÓN LITERARIA.

Podemos innovar mediante la voz narrativa. Podemos entrar directamente en la conciencia de los personajes, reproducir sus pensamientos alterar tanto el punto de vista como la voz narrativa, que desaparece, se vuelve confusa o se fragmenta en diferentes voces que subjetivan y enriquecen la ficción.

La ficción moderna imita el flujo de la conciencia mediante el estilo indirecto libre (reproduciendo el pensamiento en tercera persona pero aproximándonos al vocabulario del personaje y suprimiendo acotaciones) y el monologo interior (interpretando el fluir mental con su carácter caótico y eliminando al narrador, puesto que un personaje no tiene que narrar  cuando está pensando)

Los temas.

Identifiquémonos con los temas que más nos gustan, los que sintamos más cerca, los que queramos explicar con fervor, o los que mejor conozcamos. 

Sea el tema que sea seamos sinceros con nosotros mismos, y escribamos con lo que nace de nuestro espíritu.

El género.

Determinar el género nos indicará el modo en que tratar los temas elegidos.

Cada género está gobernado por sus propios códigos, el género policíaco a menudo arranca con un asesinato, y es protagonizado por un personaje sagaz, etc...

El tono.

Es la calidad emocional de la voz que narra la historia. Rasgo que guarda relación con el tema; puede abarcar desde lo dramático hasta lo humorístico. Para identificar el tono que mejor se adapte a nuestro cuento, debemos saber que emoción queremos que transmita. Y después que palabras o recursos lingüísticos aplicar;  jergal, ritmo lento o veloz, musicalidad, etc...No todos los cuentos que escribamos deben emplear el mismo tono, aunque lo mas probable es que tendamos a escoger uno en particular,

Pasos para hallar nuestra voz literaria.

La constante lectura de nuestros referentes literarios y la tenaz escritura, nos dará la respuesta sobre que camino seguir o sobre que escoger de ambos procedimientos.

Pero siempre hay que cumplir las cinco nomas del cuento: brevedad, doble significación, unidad interna, esencialidad, e intensidad.

El cuento postmoderno.

 - Lo moderno se sustenta en negar lo precedente aunque sin proponer nuevos caminos; tan solo mezclando o ensayando antiguas formulas.

Las propiedades de la postmodernidad son: lo fragmentario; lo transitorio; lo heterogéneo; y la ausencia de valores absolutos: Esto da pie a una lectura que se permite experimentar e intentar nuevas vías creativas si los escrúpulos que existían en la modernidad, cuando los géneros estaban bien delimitados.

La postmoderna falta de respuestas sintoniza con este género en el que lo no dicho es más importante que lo dicho. Ya que aquello no expresado (subtexto) debe ser deducido por el lector que ha de aportar una actitud más atractiva ante la narración. Y esto es lo que hace participar al lector en la búsqueda de respuestas y le da la oportunidad de sumarse a la postmodernidad.

Gracias a su extensión breve y su carácter esencial por economizar los recursos, el cuento aporta la principal característica de lo postmoderno: la experimentación. Otra característica del cuento postmoderno son sus personajes: se cuestionan contantemente la realidad en la que habitan. (individuos perdidos, inadaptados, con desequilibrios, incapaces de identificarse con ningún valor.) Pero su mayor rasgo es la ruptura con las formas tradicionales. Sobre todo con la estructura en tres actos. Es muy habitual que los cuentos no tengan principio ni final, si no que solo presenten un fragmento de la vida del personaje o personajes; de quien no sabemos de donde viene ni donde acabara su conflicto ("!tranche de vie", fragmento de vida).

Esto, en apariencia configura cuentos que no tienen conflicto. Si los leyéramos como una novela tradicional creeríamos que no pasa nada. Pero el cuento postmoderno no busca capturar la realidad para transformarla y darle forma atractiva, para que nos enganche como una novela. Lo que necesita es un lector comprometido que detecte los sutiles pulsos del texto, lo que le permitirá reescribir el cuento a su manera. En el cuento posmoderno no encontramos el conflicto narrativo, pero sí hallamos un discurso , una narración que muestra la faceta del mundo..

Durante el siglo 20 y 21 las nuevas maneras de contar historias rompen con los convencionalismos del pasado para adecuare a los lectores  que : cuestionan los géneros y la voz narrativa, diluyen a sus protagonistas, difuminan los argumentos, alteran el orden cronológico con avances y retrocesos temporales y experimentan con la sintaxis del estilo indirecto libre y monólogos interiores. Historias con puntos de vista múltiples y finales abiertos muestran con mayor realismo la ambigüedad del subconsciente y la subjetividad de la vida interior.

 - El cuento, es por definición un género autónomo, pero en ocasiones los cuentos de un mismo volumen se entrelazan de tal modo que acaban por ser leídos como una novela.

 -En ocasiones el escritor se convierte en material narrativo, pero no se trata de una biografía, si no de una "auto ficción" porque el lector nunca sabe con certeza si es cierto o inventado.

 - La metaficción es fruto inventado por el autor, al tiempo que desvela procedimientos de su composición. (Hechos reales y ficticios).

 - Las distopias son narraciones que toman la realidad como punto de partida y cuentan una historia del futuro, suelen ser críticas emocionales de la sociedad y su tiempo.

 - La ucronía o novela histórica alternativa narra que podría haber pasado si determinado episodio histórico real no hubiese ocurrido.

 - Están las arquitramas y antitramas. Las primeras (arquitramas) son narraciones donde hay un protagonista con el que es fácil identificarse.

Los hechos son cronológicos (generalmente), el protagonista lucha por sus dificultades (con una lógica causa efecto) y finalmente sabemos como han superado sus dificultades.

Las antitramas son narraciones con una estructura experimental. Donde varios personajes inmersos en una realidad azarosa comparten protagonismo bajo el peso de conflictos internos complejos y de difícil definición. A veces, incluso, en el transcurso del tiempo, esta repleto de saltos temporales hacia el pasado o hacia el futuro, estos personajes ni siquiera llegan a enfrentarse a sus obstáculos.

Además, los finales de estas obras son tan abiertos que apenas permiten a los lectores una interpretación mínimamente concluyente.

En el medio de la arquitrama y antitrama está la minitrama: obra donde el autor ha seleccionado los elementos de una u otra modalidad que mas le convienen para su narración.

 - También están los finales con un cuarto acto (en terminología cinematográfica). Finales que en el último momento cuando parecía que todo estaba resuelto, ofrecen una última vuelta de tuerca. Desmontan el final feliz de la estructura en tres actos para proporcionar una ultima y esclarecedora luz sobre la obra en su conjunto.

Y por ultimo esta la estructura circular, que conecta los contenidos del principio y el final de la narración. esta estructura permite la evolución de los personajes una vez que han vivido una serie de azarosos episodios vitales. Una visión coherente de la existencia, evidenciando que las experiencias del personaje se hallan conectadas y marcan un camino evolutivo sin retorno.

EL LIBRO DE CUENTOS

 - El modo idóneo de construir un libro de cuentos es mediante una red de historias unidas por un elemento común.

 - La manera de asegurar la calidad del libro es consiguiendo la calidad del conjunto. Por ello deberá estar estructurado mediante elementos que aseguren tal unión. Hallar un vínculo que dé coherencia a la reunión de las diferentes historias.

Libro de cuentos compuesto.

 - Consiste en establecer una hoja de ruta antes de ponernos a escribir. Para ello debemos decidir que elementos garantizan la cohesión del volumen; un tema en común, un mismo protagonista, concepto, escenario, o todas o combinando alguna de estas variables.

 - Es recomendable tener una idea de cuantos cuentos conforman el libro, sus dimensiones y cuando lo terminaremos.

Libro de cuentos completado.

 - Cuentos que ya has escrito, que no tenían una pretensión inicial de formar parte de un mismo volumen, pero entre los que se destaca un vínculo que puede convertirse en el elemento común de un conjunto de relatos. Suele ocurrir que empezamos a escribir cuentos sin una pretensión inicial y detectamos un vínculo entre ellos. Entonces la conciencia narrativa nos sugiere continuar a partir de una premisa general. Esto supone una doble tarea; primero modificar o reescribir los textos ya creados, después escribimos nuevos cuentos que se ciñan a ese plan espontáneo.

Libro de cuentos arreglado.

 - EL autor se limita a yuxtaponer textos ya creados donde ha detectado una cohesión. Solo hay que recopilarlos, darles un orden, y añadir un título.

Recursos para unir cuentos.

- Mediante una temática similar: hemos de elegir un tema central que gobernará toda la obra, y cada cuento representará una versión particular de ese concepto.

 - Mediante un escenario común: puede ser una ciudad o un país. Pero también puede ser un paisaje sin definir en el mapa o una misma atmósfera,

- Mediante personajes comunes: sin evolución del personaje, pero participando en cada historia mostrando diferentes dimensiones de su personalidad, ya sea con otros personajes o superando los conflictos particulares de cada historia.

 - Mismo género o similar tratamiento narrativo: el mismo género literario y el estilo.

 - Mediante un marco: un texto inicial que, a modo de prólogo, abre la puerta al resto de cuentos. Como un manuscrito encontrado.